Tipos de muebles vintage restaurados
marzo 5, 2025🚫 Guía Completa para Eliminar y Prevenir Termitas y Carcoma en Muebles 🐜
A continuación, te presentamos una guía completa para identificar, eliminar y prevenir la carcoma y las termitas en muebles de madera. Haz clic en el paso que más te interese para ir directamente a la sección detallada:
1. ¿Qué son la carcoma y las termitas?
Conoce las diferencias entre estos insectos xilófagos, cómo actúan y qué daños pueden causar en tus muebles.
2. Cómo detectar si hay plaga en un mueble
Señales visuales, sonidos, residuos y otros indicios que te ayudarán a confirmar si tu mueble está afectado.
3. Métodos para eliminar la carcoma
Desde remedios caseros hasta productos insecticidas específicos: qué funciona realmente y cómo aplicarlo.
4. Métodos para eliminar las termitas
Cebos, espumas, tratamientos químicos e intervenciones profesionales. Todo lo que puedes hacer según el tipo de termita.
5. Medidas preventivas para evitar futuras infestaciones
Consejos clave para mantener tus muebles protegidos y detectar a tiempo cualquier problema.
6. Cuándo llamar a un profesional
Cómo saber si necesitas ayuda especializada y qué soluciones ofrecen las empresas de control de plagas.
Este esquema te ayudará a identificar el problema y actuar rápido, protegiendo tus muebles y tu hogar. Ya sea que tengas una pieza antigua con valor sentimental o un mueble de uso diario, esta guía te dará las herramientas para conservarlo en buen estado por muchos años. ¡Vamos paso a paso!
Introducción a la termita y carcoma
Las termitas y la carcoma son dos tipos de insectos xilófagos (es decir, que se alimentan de madera) capaces de causar graves daños en nuestros muebles de madera. Pueden comprometer la estructura de armarios, mesas, puertas y otros enseres, arruinando tanto su estética como su resistencia. En esta guía explicaremos de forma sencilla qué son estos insectos, cómo identificar su presencia en el mobiliario, y qué métodos (tanto caseros como profesionales) existen para prevenirlos y eliminarlos.
¿Por qué son un problema? Las termitas suelen actuar de forma silenciosa, comiendo la madera desde dentro hacia afuera. Muchas veces no notamos su presencia hasta que el daño es significativo (la madera puede quedarse hueca y débil). La carcoma, por su parte, perfora la madera dejando orificios y polvillo de serrín, degradando muebles antiguos, vigas, marcos y otros objetos de madera. Ambas plagas pueden pasar desapercibidas al principio, pero si no se controlan a tiempo, el deterioro puede ser severo – incluso en muebles valiosos o con valor sentimental.

¿Qué son las termitas?
Las termitas son insectos sociales (organizados en colonias con reinas, obreras y soldados) que se alimentan de la celulosa de la madera y otros materiales como papel o cartón. Aunque a veces se las llama “hormigas blancas”, no son hormigas en realidad, pero a simple vista pueden parecer similares: tienen cuerpo blando y claro, seis patas, cabeza con antenas, y ciertas castas desarrollan alas temporales para dispersarse. Existen distintos tipos: las termitas subterráneas construyen nidos en el suelo y acceden a la madera por medio de túneles de barro que les proporcionan humedad y oscuridad. Por otro lado, las termitas de madera seca viven directamente dentro de la pieza de madera que infestan, sin necesidad de suelo húmedo.
Daños típicos causados por termitas en la madera: el interior queda hueco y frágil, a menudo sin romper la capa superficial hasta fases avanzadas
¿Qué daños causan?
Las termitas devoran la madera desde adentro, creando galerías internas y reduciendo su resistencia mecánica. En muebles, pueden provocar deformaciones, crujidos o partes hundidas sin que veamos daños externos evidentes al principio. Con infestaciones avanzadas, la superficie puede romperse al mínimo contacto debido a que por dentro está prácticamente hueca. En casa, las termitas atacan no solo muebles; también pueden afectar marcos de puertas y ventanas, suelos de parquet e incluso estructuras de vigas, con serios riesgos estructurales. A diferencia de la carcoma, las termitas no suelen dejar agujeros visibles con serrín; en el caso de las subterráneas, mantienen la madera intacta por fuera mientras la vacían por dentro, y suelen
sellar cualquier abertura con barro. Las termitas de madera seca sí perforan pequeños orificios de salida, pero los utilizan para expulsar sus excrementos (unas pelotillas diminutas) y luego los tapan nuevamente

¿Qué es la carcoma?
En realidad, la carcoma no es un insecto específico, sino el nombre común que se da a la fase larvaria de varias especies de escarabajos que perforan la madera. Cuando hablamos de “carcoma” en los muebles, nos referimos principalmente a las larvas de estos escarabajos (anóbidos, cerambícidos, lyctus, etc.), que taladran galerías en maderas secas durante meses o años hasta convertirse en adultas. Las larvas de carcoma tienen aspecto de gusanitos de color blanco cremoso, cuerpo arqueado, sin patas ni antenas visibles. Permanecen ocultas en el interior de la madera alimentándose de ella, y es en esta fase larvaria cuando causan el mayor daño.
Cuando la larva completa su ciclo y se transforma en escarabajo adulto, perfora la superficie y sale al exterior, dejando el característico agujero redondo en la madera. Estos agujeritos (por lo general de 1 a 3 mm de diámetro en el caso de la carcoma común de los muebles) suelen ser el primer signo visible de la infestación. Junto a los orificios, es típico encontrar un polvo fino parecido al talco o arena, que es el serrín o “guasilla” expulsado de las galerías. Cada agujero indica que una larva llegó a adulta y salió; sin embargo, eso no significa que la plaga haya terminado. En muchos casos, los adultos habrán puesto nuevos huevos en la misma madera antes de morir, iniciando un nuevo ciclo. Por eso, una pieza con agujeros de carcoma puede seguir infestada internamente por larvas jóvenes aunque no veamos “polvillo” nuevo cada día.
Preferencias de la carcoma: Estos insectos atacan sobre todo maderas secas, añejas o debilitadas. Prefieren entornos protegidos de la intemperie, como el interior de casas, almacenes o muebles, antes que troncos al aire libre. Es común encontrarlos en muebles antiguos, vigas viejas, suelos de madera y marcos – en general, en madera estacionada y no reciente. Raramente atacan árboles vivos o madera recién cortada. Algunos tipos de carcoma famosos son la carcoma común o escarabajo del mueble (Anobium punctatum), el escarabajo polilla o del reloj de la muerte (Xestobium rufovillosum, que produce un ruido “tictac” al roer), o en estructuras el taladro o carcoma grande (Hylotrupes bajulus, que ataca vigas y puede hacer agujeros más grandes, de 6–10 mm). Cada especie tiene ciclos de vida y diámetros de orificio distintos, pero para el dueño de casa los efectos visibles son similares.
Diferencias entre termitas y carcoma en los muebles
Aunque ambas plagas destruyen la madera, es importante distinguir si el mueble tiene termitas o carcoma, pues su biología y tratamiento difieren. A continuación resumimos las diferencias más notables:
- Tipo de insecto: La termita es un insecto social del orden Isoptera (pariente lejano de las cucarachas) con castas especializadas. La carcoma corresponde a larvas de escarabajos (orden Coleoptera) que actúan de forma independiente dentro de la madera. Una colonia de termitas puede contar miles o millones de individuos cooperando; en cambio, las larvas de carcoma no tienen cooperación social, cada una va por su cuenta dentro de la madera.
- Apariencia de los insectos: Las termitas obreras (las que más daño hacen) miden unos milímetros, de color blanco-translúcido, cuerpo blando y segmentado, cabeza con antenas rectas y mandíbulas. Pueden o no tener alas (solo las reproductoras jóvenes tienen alas, que pierden tras el vuelo nupcial. Las carcomas larvarias son gusanos blancos sin ojos ni patas visibles, con el cuerpo arrugado en forma de “C” y cabeza pequeña oscura; prácticamente nunca las vemos porque viven ocultas en la madera. Solo vemos (a veces) los escarabajos adultos que salen: suelen ser pequeños (2–5 mm en el caso del escarabajo del mueble), de color marrón oscuro o negro, con alas duras. Los adultos de carcoma viven poco tiempo y no comen madera, solo se aparean, ponen huevos en la madera y mueren.
- Daños visibles en la madera: La carcoma produce orificios circulares y limpios en la superficie de la madera cuando emergen los adultos. Alrededor o debajo de estos agujeros suele haber montoncitos de serrín muy fino (como polvo de talco, en especies comunes) o algo más grueso y granuloso (en especies de orificio grande). Cada agujero es como “salida” de una larva. Por el contrario, las termitas (especialmente las subterráneas) no suelen dejar agujeros visibles abiertos. Ellas consumen el interior dejando apenas una delgada capa superficial intacta. Si necesitan salir, construyen tubos de barro en la superficie para moverse protegidas, pero no agujerean la madera al exterior como tal. Las termitas de madera seca sí pueden hacer orificios pequeños para expulsar excrementos, pero estos orificios suelen estar tapados con una especie de tapón de barro o fibra que las termitas fabrican. En resumen: si ves agujeros limpios y polvo, es indicio de carcoma; si la madera aparenta estar intacta por fuera pero hueca por dentro, o con barro, sospecha de termitas.
- Tipo de excrementos o residuos: Relacionado con lo anterior, la carcoma produce serrín o polvo de madera muy fino, resultado de roer los túneles. Al tacto es como arenilla o talco de color claro; técnicamente es excremento mezclado con madera triturada. Las termitas de madera seca expulsan sus excrementos en forma de diminutos gránulos duros, a menudo llamados pellets o polvillo de termitas. A simple vista pueden confundirse con serrín, pero son más pesados, con forma de bolitas alargadas (a veces con estrías, vistas con lupa) y color marrón claro. Se acumulan en montoncitos cónicos debajo de los orificios de expulsión, si los hay. En las termitas subterráneas, en cambio, no veremos serrín ni pellets, ya que aprovechan todo y mantienen sus galerías limpias, usando el material para construir tubos o simplemente dejándolo dentro de la cavidad.
- Presencia de barro y humedad: Las termitas subterráneas siempre necesitan humedad y oscuridad. Por eso crean tubos de barro o “caminitos” de color marrón adheridos a paredes, esquinas o superficies de madera, para desplazarse sin exponerse al aire. Si encuentras unos cordones de barro seco en la pared o en la cara oculta de un zócalo, es casi seguro indicio de termitas. La carcoma no produce barro ni requiere conexiones con el suelo; sus larvas viven aisladas dentro de la madera y los escarabajos adultos salen al aire libre brevemente para volar y reproducirse.
- Temporada y ciclo: Las termitas tienen colonias perennes (la reina puede vivir muchos años poniendo huevos). En climas templados, suelen “enjambrar” en primavera o verano: es cuando aparecen termitas aladas en masa saliendo de su nido para fundar nuevas colonias. Si en tu casa ves de repente un enjambre de alados voladores o montones de alitas transparentes desprendidas en el suelo o cerca de ventanas, esa es una señal de infestación de termitas en las cercanías. La carcoma, en cambio, sigue un ciclo anual: normalmente en los meses cálidos (primavera-verano) emergen los escarabajos adultos de la madera dejando nuevos agujeros. Puede que los veas revoloteando cerca de lámparas o en ventanas, pero son pocos y pasan desapercibidos. Tras poner huevos, mueren. Luego las nuevas larvas pueden vivir dentro de la madera varios años antes de salir, dependiendo de la especie y condiciones. Así, los daños de carcoma pueden parecer intermitentes: unos años ves nuevos agujeros, otros no, pero la infestación puede seguir activa por dentro.
En resumen: Si encuentras agujeros pequeños redondos en tus muebles con polvillo fino, es muy probable que se trate de carcoma (larvas de escarabajo). Si, en cambio, el mueble presenta zonas ahuecadas, partes que se deshacen al tocarlas, sin agujeros visibles (o con presencia de barro, tubos en paredes, o alas de insectos), es más indicativo de termitas. A continuación, veremos cómo detectar cada caso con más detalle y qué hacer al respecto.
Cómo detectar una infestación de termita o carcoma en tus muebles
Identificar a tiempo la presencia de termitas o carcoma es clave para salvar el mueble antes de que el daño sea irreversible. Aquí tienes signos de alerta y consejos de inspección:
- Agujeros y serrín: Revisa la superficie de la madera en tus muebles (especialmente por debajo, en la cara trasera o en rincones poco visibles). Los agujeros redondos de 1–3 mm acompañados de polvillo fino son signo típico de carcoma. Pon un papel debajo del mueble y golpéalo ligeramente: si cae polvillo parecido al talco, indica actividad de carcoma (las larvas empujan restos fuera). En infestaciones avanzadas, la madera puede tener tantos agujeros que parece un queso Gruyère. En cambio, las termitas subterráneas no dejan serrín; si golpeas una zona infectada de termitas, podría desprenderse una costra superficial y mostrar galerías vacías o con tierra dentro, pero sin polvo suelto. Las termitas de madera seca sí expulsan pequeños gránulos; búscalos en el suelo, dentro de cajones o al mover el mueble. Estos gránulos de termita son un poco más gruesos que el serrín de carcoma y tienden a ser del color de la madera o marrón.
- Sonidos en la madera: Tanto carcomas como termitas pueden producir ruiditos si la infestación es grande y el entorno muy silencioso. En el caso de la carcoma, acercando el oído a la madera a veces se percibe un leve chasquido o crujido repetitivo, causado por las larvas al masticar. Las termitas subterráneas suelen ser silenciosas al comer, pero cuando son perturbadas pueden golpetear la madera con la cabeza para alertar a la colonia, produciendo un sonido seco (como clics) que en silencio total podría oírse. Si escuchas ruidos no habituales dentro de un mueble o pared de madera, investiga más.
- Superficie abombada o hueca: Toca y presiona ligeramente la madera. En termitas, a veces la superficie pintada o barnizada oculta que por dentro está carcomida. Si al golpear suavemente con los nudillos suena “a hueco” o cruje/flexa más de lo normal, podría haber galerías internas. También observa si hay zonas deformadas, hundimientos o burbujas en la superficie de madera o pintura; esto puede pasar cuando debajo la madera ha sido comida (por termitas) o está muy debilitada (por carcoma). En carcoma, la madera puede volverse frágil y romperse en pedazos si la infestación es severa, presentando grietas y partes cuarteadas.
- Insectos vivos o muertos: Aunque no siempre se ven, es buena idea buscar los bichitos en sí. Las termitas aladas suelen ser vistas en primavera-verano dentro de casa, volando alrededor de luces o acumulándose en ventanas – son de color oscuro con alas translúcidas iguales en tamaño. Si encuentras un montoncito de alas desprendidas en el alféizar, significa que termitas aladas salieron cerca (posiblemente de un mueble o del suelo). Por otro lado, los escarabajos adultos de carcoma son pequeños (parecen escarabajitos marrones de unos 2–5 mm). Podrías hallarlos muertos en los marcos de ventanas, cerca de lamparillas o sobre el propio mueble infestado durante el verano. Ver aunque sea uno debería encender alarmas para inspeccionar la madera de donde pudo haber salido.
- Tubos de barro o caminos: Como mencionamos, en termitas subterráneas es muy revelador encontrar sus túneles de barro. Son como cordones delgados de tierra seca adheridos, de unos milímetros de diámetro, que recorren superficies duras para conectar el nido (generalmente en el suelo o subsuelo) con la fuente de alimento (tu mueble). Revisa las paredes cerca del mueble, rodapiés, esquinas del piso, o incluso patas y trasera del mueble si está cerca del suelo. Rompe un trozo de ese conducto si lo ves: si está activo, puede que veas termitas obreras blanquecinas dentro del túnel. En caso de carcoma, no habrá tubos externos; su presencia se limita a los orificios y serrín mencionados.
- Humedad y contexto: Pregúntate si el mueble ha estado en ambientes húmedos o contacto con tierra. Las termitas requieren algo de humedad, por lo que sótanos, habitaciones con filtraciones o casas bajas con suelo de tierra son entornos de riesgo. La carcoma, en cambio, prolifera más en maderas secas pero viejas; un mueble antiguo heredado, vigas en áticos poco ventilados o un objeto de madera comprada en mercadillo podrían ya traer carcoma. Siempre que introduzcas un mueble usado a casa, revisa bien que no tenga agujeros ni serrín.
Consejo: Realiza inspecciones periódicas a tus muebles de madera, sobre todo aquellos de gran valor o antigüedad. Presta atención especial a la parte trasera y debajo (que es donde suelen iniciar las infestaciones porque está oscuro y tranquilo). Usa una linterna para ver grietas, junta el polvo que encuentres y míralo con lupa si es serrín o son bolitas, e identifica según lo descrito. Si detectas cualquiera de estos signos, actúa de inmediato con las medidas que explicamos a continuación, porque una vez instalada la plaga, cuanto más tiempo pase, más difícil y costosa será de erradicar.

Cómo prevenir las termitas y la carcoma en el mobiliario
La prevención es tu mejor aliada para evitar que estos insectos ataquen tus muebles. Aquí te resumimos medidas preventivas que puedes tomar en casa, centradas sobre todo en entornos comunes en España (válidas también para otros países con plagas similares):
- Controla la humedad ambiental: Como hemos visto, la humedad favorece a muchas termitas y también a ciertos hongos que pueden debilitar la madera. Mantén tu casa bien ventilada, especialmente sótanos, altillos y habitaciones poco usadas. Repara filtraciones, goteras o tuberías con fugas que mantengan zonas de madera húmedas. Evita condensación excesiva: por ejemplo, después de ducharte abre la ventana del baño para que no quede humedad condensada si hay muebles o puerta de madera. En climas húmedos, usar un deshumidificador eléctrico en la habitación donde tienes muebles valiosos puede ayudar a mantener la humedad relativa por debajo de ~60%, haciéndola menos propicia para termitas subterráneas y para mohos.
- Aísla la madera del suelo y del exterior: Las termitas subterráneas acceden desde el terreno, así que conviene minimizar el contacto de la madera con la tierra. Si tienes muebles de jardín o casetas de madera, asegúrate de que estén elevadas del suelo (por ejemplo, sobre una base de cemento). Las patas de mesas o armarios que estén en planta baja deberían evitar contacto con suelos húmedos; poner tacos o bases de metal/piedra puede ser útil. Mantén las leñas, troncos o restos de madera almacenados lejos de la casa o al menos elevados y ventilados, ya que una pila de leña contra la pared es una invitación para las termitas (y también foco de carcomas que luego pueden migrar a muebles). Dentro de casa, evita dejar objetos de cartón, papel o madera almacenados directamente en sótanos o garajes sin ventilación, porque actúan como “cebo” para termitas.
- Mantenimiento y limpieza regular: Los muebles cuidados resisten mejor. Limpia el polvo periódicamente, pues así es más probable que notes a tiempo si aparece serrín o algún cambio. En muebles poco movidos, cambia su posición cada cierto tiempo o sepáralos 2–3 cm de la pared (esa franquicia de ventilación también te permite inspeccionar detrás). Aspira o barre debajo de los muebles – a veces allí se notan los primeros signos de serrín o alas caídas. Si vives en zona con termitas conocidas, revisar sótanos y esquinas de la casa cada primavera en busca de alas o tubos es una buena práctica.
- Tratamientos preventivos en la madera: Si adquieres muebles de madera sin tratar o hechos a medida, considera aplicarles un protector antixilófagos antes del acabado final. Existen barnices, lasures o imprimaciones con insecticida/fungicida incorporado que protegen contra carcoma y termitas. Por ejemplo, productos con permetrina o boratos se pueden pincelar en la madera cruda (o inyectar en taladros) para inmunizarla antes de barnizar o pintar. Esto es especialmente importante en muebles o vigas que quedarán en lugares difíciles de inspeccionar luego. En muebles antiguos o restaurados, al lijar y repintar puedes aprovechar para aplicar un tratamiento preventivo en las capas internas. Ojo: siempre sigue las instrucciones de estos productos, usa guantes y ventila bien el área al aplicarlos.
- Cuidado con lo que entra en casa: Muchas infestaciones de carcoma comienzan al introducir un objeto ya infectado (un mueble antiguo de anticuario, un marco rescatado de un trastero, etc.). Inspecciona cuidadosamente cualquier mueble de segunda mano antes de meterlo en habitaciones con otros muebles. Si ves agujeros o o sospechas, mantén ese objeto aislado en cuarentena (por ejemplo en el garaje) y trátalo preventivamente antes de integrarlo con tus otras pertenencias. De igual forma, si en tu zona hay termitas, ten precaución con traer a casa madera de procedencia dudosa sin tratar.
- Entorno del jardín y casa: Si vives en chalet o planta baja, mantén el perímetro de la casa limpio de madera muerta. Troncos, tocones de árbol viejos cerca de la casa o vallas de madera en contacto con el suelo son focos que pueden atraer colonias de termitas. Si tienes estructura de porche o similares de madera, vigila que no toque directamente la tierra. Un consejo utilizado es enterrar pequeñas estacas de madera blanda en el jardín alejadas de la casa y revisarlas cada cierto tiempo: si aparecen royos o con termitas, es señal de alarma para llamar a un profesional. Este método casero sirve para detectar termitas subterráneas cercanas antes de que invadan la vivienda.
Aplicando estas medidas se reduce enormemente la probabilidad de infestación. Aun así, ningún método es infalible al 100%. Si a pesar de todo aparecen termitas o carcoma, toca pasar a la acción con tratamientos curativos, que explicamos en la siguiente sección.

Métodos caseros y profesionales para eliminar la carcoma (muebles)
Si has identificado carcoma en tus muebles, especialmente en etapas iniciales, existen métodos caseros que pueden ser efectivos para infestaciones leves o localizadas. Para casos más severos, conviene recurrir a tratamientos químicos específicos e incluso ayuda profesional. Veamos las opciones:
1. Congelación del mueble u objeto
La congelación es un método no tóxico y efectivo para matar la carcoma en objetos pequeños de madera. Las larvas no soportan temperaturas muy bajas prolongadas. Tienes dos enfoques:
- Spray congelante (“congelador químico”): En tiendas de bricolaje existen aerosoles de congelación instantánea diseñados para plagas de madera, como el Zum Cold Spray o “congelador para carcoma”. Estos productos expulsan un gas a muy baja temperatura que congela al contacto las larvas dentro de la madera. Para usarlo, primero ponte guantes y gafas de protección. Aplica el spray directamente sobre los agujeros y zonas afectadas del mueble, empapando bien la madera en esos puntos. La caída brusca de temperatura mata las larvas al instante en esas áreas. Luego ventila el mueble (puede soltar vapor frío). Inspecciona después de unos días; si notas todavía actividad (nuevo serrín), puedes repetir el proceso. Este método es rápido y limpio, ideal para objetos pequeños o partes concretas infestadas. Nota: Sigue las instrucciones del fabricante del spray, ya que algunos recomiendan varias aplicaciones y tiempos de espera.
- Congelación tradicional: Si el tamaño del objeto lo permite y dispones de un arcón congelador grande, puedes meter el mueble en el congelador. Envuélvelo primero en plástico o bolsas herméticas (para que la humedad de la descongelación no lo dañe). Déjalo al menos 72 horas a -18°C o menos. Este tiempo asegura que el frío penetra bien y extermina larvas y huevos. Pasado ese tiempo, saca el mueble pero no lo desempaques de inmediato: deja que vuelva a temperatura ambiente gradualmente en unas 24 horas. Esto evita condensación de agua directa sobre la madera. Tras aclimatarse, desempaqueta y revisa. Este método es muy eficaz (museos lo usan para desinfectar piezas pequeñas). Para muebles grandes que no caben en un congelador doméstico, algunas empresas de control de plagas ofrecen servicios de cámaras de congelación o choque térmico donde meten los muebles a muy baja temperatura.
2. Tratamiento con insecticida específico para madera
Es el método clásico y más utilizado contra la carcoma en muebles. Consiste en aplicar un insecticida formulado para penetrar en la madera y eliminar las larvas en el interior. Hay distintos formatos: líquido para brocha, aerosol, gel, jeringas de inyección, etc. Pasos generales:
- Elección del producto: Busca un producto “anticarcoma” o “tratamiento para madera contra insectos xilófagos”. Los principios activos comunes suelen ser permetrinas o cipermetrinas (insecticidas sintéticos) o bien boratos (sales de boro) en productos más ecológicos. Por ejemplo, el Xylazel Carcomas o el Soluguard Anticarcoma son marcas conocidas: contienen permetrina al ~0,2% y actúan contra carcoma y termitas. Asegúrate de que el producto diga "curativo y preventivo", para que mate las larvas presentes y proteja contra reinfestación. Muchos de estos productos se venden en Amazon y ferreterías (presentaciones de 400 ml, 750 ml, 5 L, etc., según la extensión del tratamiento).
- Preparación: Lleva el mueble a un área bien ventilada (o al aire libre si es posible, pero a la sombra). Usa guantes de goma y mascarilla protectora, ya que estos químicos pueden ser tóxicos al contacto o inhalación. Si el mueble tiene acabado (barniz, pintura), lo ideal es decapar o lijar ligeramente la superficie para facilitar la penetración del insecticida en la madera cruda. Si no es posible, al menos limpia la superficie con un cepillo o paño para quitar polvo y suciedad.
- Aplicación a fondo: a) Por brocha: si es líquido, empapa una brocha o pincel y aplica generosamente sobre toda la madera, insistiendo en las zonas con agujeros. La madera debe quedar bien impregnada (muchos productos recomiendan dar 2 o 3 manos húmedas). b) Inyección: muchos kits traen cánulas o jeringuillas para inyectar el producto directamente en cada agujero de carcoma. Hazlo, rellena cada orificio visible con el líquido o gel. Para facilitar, puedes taladrar con una broca fina algunos agujeros nuevos en partes gruesas del mueble y por allí inyectar más profundamente. c) Aerosoles: vienen con un tubito aplicador que se inserta en los agujeros, presionas y el líquido penetra a presión. De nuevo, hazlo en todos los orificios que veas. Trabaja hasta mojar bien toda la pieza. No olvides patas, traseras y zonas ocultas.
- Sellado y espera: Tras empapar el mueble de insecticida, cubre el mueble con plástico de pintor o mételo en una bolsa grande hermética si cabe, por 24-48 horas. Esto crea un efecto “cámara” que asfixia a las larvas y permite que el producto actúe sin evaporarse. Luego destapa y deja ventilar varios días hasta que se evapore el olor (muchos productos actuales son inodoros o de bajo olor).
- Revisión y retoques: Pasadas unas semanas, inspecciona el mueble. Si el tratamiento fue exitoso, no debería aparecer nuevo serrín ni agujeros frescos. Es normal seguir viendo los orificios antiguos (puedes taparlos con cera o masilla para madera si lo deseas por estética). Si aún notas actividad, quizás quedaron larvas vivas; repite el proceso en esas áreas. Una vez seguro, procede a restaurar el acabado (repintar, barnizar) si habías lijado. Tip: Muchos profesionales finalizan inyectando en los agujeros un poco de cera o pegamento tras el tratamiento, para evitar que adultos emergentes (si alguno sobrevivió) salgan o nuevas hembras pongan huevos ahí de nuevo.
Este método es eficaz y relativamente económico. Productos recomendados: Por ejemplo, Xylazel Carcomas Plus (formato líquido o spray) es un tratamiento al disolvente incoloro y de bajo olor, diseñado para protección curativa y preventiva de la madera contra carcomas y termitas. Otro muy usado en España es Corpol en aerosol, o el mencionado Soluguard Anticarcoma, a base de permetrina, que destaca por ser base agua, inodoro y atacar todas las fases (huevos, larvas, adultillos) de insectos de la madera. Estos productos están disponibles en tiendas y en línea – de hecho, Soluguard tiene miles de valoraciones positivas en Amazon por su eficacia.

3. Métodos naturales o caseros adicionales
Existen algunos remedios caseros populares para la carcoma, con efectividad variable. Pueden servir de apoyo o en casos muy leves, aunque no garantizan la erradicación total como un insecticida específico:
- Vinagre o limón: Se ha hablado de aplicar vinagre blanco o jugo de limón en la madera para ahuyentar carcoma. Son ácidos naturales que podrían incomodar a las larvas cerca de la superficie, pero no las matarán en profundidad. Puedes probar humedeciendo un paño con vinagre e impregnando la madera, o inyectando mezcla de vinagre y aceite (por ejemplo de oliva) en agujeros. Ayuda más como preventivo ligero o para limpiar la zona, pero no confíes solo en esto si la infestación está activa.
- Ajo, cebolla o laurel: Son remedios de la abuela. Colocar dientes de ajo machacados o trozos de cebolla dentro de cajones supuestamente repele a la carcoma por el olor. De igual modo, hojas de laurel en armarios. Pueden servir para ahuyentar a los escarabajos adultos de que pongan huevos, pero no eliminarán las larvas ya presentes.
- Aceites esenciales (neem, lavanda): El aceite de neem tiene propiedades insecticidas suaves. Algunos aficionados aplican aceite de neem o de lavanda en los muebles. Pueden actuar como repelente y quizás intoxicar a larvas poco profundas, pero su alcance es limitado. Si lo usas, que sea tras un tratamiento principal, como refuerzo aromático.
- Calor solar: La carcoma no tolera el calor extremo. Si es verano y vives en zona cálida, exponer el mueble al sol intenso varias horas (cubierto con plástico negro para aumentar la temperatura interna) puede llegar a matar algunas larvas cerca de la superficie. Sin embargo, para que el calor llegue al centro de la madera se requieren temperaturas muy altas (>50°C sostenido), difíciles de lograr sin equipo especial de cámara de calor. Aun así, sacar el mueble al sol y aire puede reducir humedad y desanimar a los bichos.
Importante: Los remedios caseros suelen ahuyentar más que eliminar. Pueden lograr que la plaga se ralentice o migre a otro sitio (por ejemplo, de tu mueble a otro lugar), pero rara vez eliminan todas las larvas a medio-largo plazo. Úsalos complementando métodos comprobados. Si combinas prevención, remedios naturales y luego aplicas un buen insecticida, aumentarás las probabilidades de salvar el mueble.
4. Asistencia profesional para carcoma
Si la infestación es muy extensa (mueble valioso lleno de agujeros, o son muchos muebles afectados en casa), conviene buscar un profesional en tratamientos de la madera. Ellos pueden evaluar la gravedad con herramientas (a veces usan dispositivos de sonido o humedad para detectar galerías ocultas). Los métodos profesionales incluyen:
- Inyección profunda y cámaras de gas: Para muebles históricos o de gran valor, se puede envolver el mueble en plástico y aplicar una fumigación con gas insecticida (por ejemplo, gases como fosfina o fluoruro de sulfurilo). Este procedimiento, similar al que se usa en bienes patrimoniales, garantiza la eliminación total de cualquier insecto en cualquier fase. Eso sí, solo personal autorizado puede hacerlo, y suele ser costoso. Se reserva para casos muy especiales.
- Tratamientos de horno o microondas: Algunas empresas tienen cámaras de calor donde colocan los muebles y elevan la temperatura a ~55°C por varias horas, lo que mata todas las fases sin dañar excesivamente la madera (aunque hay que vigilar acabados y colas). Otros disponen de equipos de microondas para focalizar calor en vigas o muebles grandes in-situ, matando larvas con radiación controlada. Nuevamente, esto requiere profesionales con equipamiento.
- Productos profesionales concentrados: Un experto puede aplicar productos de uso profesional más potentes que los domésticos, a veces inyectando formulaciones concentradas de permetrina, cipermetrina o otros compuestos en puntos estratégicos del mueble, asegurando penetración completa. Además, ellos suelen desmontar parcialmente el mueble si es posible para tratar internamente.
La ventaja de acudir a profesionales es la garantía: muchas empresas dan garantía de varios años tras el tratamiento de carcoma, porque monitorean y reaplican si es necesario. Valora esta opción si los métodos caseros no han resultado o si el mueble tiene un gran valor que justifica invertir en una restauración libre de plagas.
Métodos para eliminar las termitas (muebles y hogar)
El combate contra las termitas suele ser más difícil que contra la carcoma, ya que implica lidiar con colonias enteras de miles de individuos. Además, mientras la carcoma suele limitarse a un mueble, las termitas pueden extenderse por la vivienda (estructuras, marcos, bibliotecas, suelos, etc.). No existe un “remedio casero milagroso” para eliminar termitas completamente, pero veamos qué opciones hay y cómo proceder:
1. Tratamiento químico por inyección o barrera
Este enfoque busca eliminar o repeler termitas aplicando insecticidas directamente en la madera infestada y zonas circundantes. Puede hacerse de forma localizada por uno mismo en casos pequeños, o a nivel profesional para protección amplia.
- Inyección en la madera afectada: Si identificaste termitas en un mueble aislado (por ejemplo, un marco de puerta, una estantería), puedes intentar un tratamiento localizado similar al de la carcoma: perfora orificios e inyecta un termiticida líquido en las galerías. Existen productos específicos para termitas en madera (muchos también son base permetrina o cipermetrina, similares a los anticarcoma, ya que matan a cualquier insecto xilófago). Por ejemplo, algunos gels insecticidas “carcoma y termitas” disponibles comercialmente sirven para esto. Aplica abundantemente en todo el mueble. Advertencia: A diferencia de la carcoma, las termitas viven en grupo; con la inyección probablemente matarás las que estén en ese momento en el mueble, pero la colonia (en suelo o pared) puede sobrevivir y volver a aparecer buscando rutas nuevas. Aun así, es útil como medida de choque inicial para cortar el daño en ese punto.
- Espumas y aerosoles termiticidas: En mercados como el americano existen espumas expansivas con ingrediente activo (ej. fipronil o imidacloprid) para inyectar en cavidades y que el producto se expanda por las galerías de termitas. Un ejemplo es la espuma termicida Spectracide Terminate muy usada en EE.UU., que mata termitas por contacto. En España, es menos común en venta al público, pero algunas versiones caseras se encuentran en Amazon (buscar “espuma termitas”). Su aplicación es sencilla: agitas la lata, insertas cánula en un agujero o ranura de la madera/pared infestada, y llenas con la espuma. Esta se expande y empapa a las termitas ocultas, matándolas al instante en esa zona. Útil para focos localizados o para grietas en paredes donde entran termitas. Tras aplicar, se revisa a las semanas a ver si hay nueva actividad; si no, genial, si sí, repetir o combinar con otro método.
- Barreras químicas (tratamiento de suelo): Si sospechas que las termitas vienen del suelo (subterráneas), una solución profesional es establecer una barrera química alrededor de la casa o en el suelo bajo el piso. Esto implica inyectar un termiticida potente en el terreno circundante o directamente bajo los cimientos y soleras, creando una zona tóxica que las termitas no puedan atravesar. Productos a base de fipronil, cloripirifos o permetrina concentrada se utilizan para este fin, pero requieren hacer perforaciones en el suelo/pared cada cierto intervalo e inyectar con equipo a presión. No es algo casero, requiere empresas autorizadas de control de plagas. Sin embargo, para un propietario en zona de riesgo, hay versiones como concentrados (ej. con fipronil) que uno mismo podría aplicar cavando zanjas alrededor de la casa y vertiendo la solución (en USA venden concentrados bajo nombres como Hi-Yield 38 Plus, etc.). Repetimos, esto es relevante solo si hablamos de una invasión general de termitas en la vivienda, no de un mueble aislado.
- Remedios caseros poco eficaces: Se suelen mencionar mezclar ácido bórico con agua o con aguarrás e inyectarlo en la madera, o rociar con petróleo/queroseno, etc.. La realidad es que pueden matar termitas en contacto directo, pero no eliminan la colonia entera y pueden ser peligrosos para ti y la madera (el aguarrás y gasolina son inflamables y dañan acabados). El ácido bórico, por ejemplo, funciona mejor como preventivo (borax impregnado en madera evita que se la coman) o para termitas de madera seca en su interior, pero con termitas subterráneas se queda corto. Puedes usarlo como apoyo: disuelve borax en agua caliente y con jeringa aplícalo en galerías visibles; no hará mal, pero tampoco confíes solo en ello.
2. Cebos e intercepción de la colonia
Los cebos para termitas han revolucionado el control de termitas subterráneas. Consisten en colocar estaciones con un material celulósico (madera, cartón) impregnado de un insecticida de efecto lento que las termitas obreras transportan de vuelta al nido, envenenando a la reina y demás individuos poco a poco. Son ideales cuando no se puede acceder fácilmente al termitero.
- Estaciones de cebo en el exterior: Se instalan una serie de “estacas” o portacebos enterrados en el perímetro del jardín o cerca de la estructura afectada. Suelen ponerse cada pocos metros. Regularmente (cada mes, por ejemplo) se revisan: si hay termitas comiendo el cebo, se reemplaza por uno nuevo con veneno. Ingredientes activos comunes en cebos comerciales son inhibidores de la síntesis de quitina (IGRs) como hexaflumurón, diflubenzurón o noviflumurón, que impiden a las termitas mudar su exoesqueleto, provocando su muerte tras cierto tiempo. Lo importante es que son de acción retardada: las termitas no mueren inmediatamente al comerlos, así que no sospechan y siguen compartiendo ese alimento con la colonia (por trofalaxia, alimento boca a boca). En semanas, la colonia colapsa por falta de individuos sanos. Este método es muy efectivo y respetuoso con el ambiente, porque usa muy poca cantidad de biocida focalizado. En Amazon se pueden encontrar kits de cebos para termitas de madera con IGR (por ejemplo, hay uno con diflubenzurón de marca Remi u otras), aunque en muchos casos la instalación óptima la realiza una empresa especializada que sabe dónde colocarlos y monitorearlos.
- Cebos en muebles o interiores: También existen portacebos planos que se pueden colocar directamente en la zona infestada dentro de casa – por ejemplo, sobre un marco de puerta con actividad o pegados a una pared donde se ven termitas. Tienen ranuras para que las termitas entren, tomen el cebo envenenado y regresen. Son limpios y no desprenden nada al ambiente de la casa. Hay que dejarlos quietos y revisarlos según instrucciones (por lo general, cada 4-6 semanas). Si desaparece el cebo o está lleno de termitas muertas, se repone hasta que cese la actividad. Atención: Este método requiere paciencia; la eliminación completa de la colonia puede tardar varios meses, incluso un año en casos grandes. Durante ese tiempo no debes matar a las termitas que veas cerca de los cebos (déjalas que lleven el “regalo” a sus compañeras). La ventaja es que es muy dirigido y no implica rociar venenos por todos lados.
Los cebos han demostrado ser eficaces, pero se recomienda que un profesional supervise su uso para asegurar la correcta colocación y seguimiento. Muchas veces se combinan con un tratamiento químico puntual para proteger ciertas estructuras mientras los cebos hacen su trabajo a largo plazo.

3. Llamar a profesionales para termitas
Debido a la naturaleza compleja de las termitas, lo más seguro y garantizado es acudir a expertos en control de plagas de termitas si sospechas una infestación activa en casa. Las empresas cuentan con herramientas de detección (radares acústicos, cámaras térmicas) para localizar la extensión del problema. Los tratamientos profesionales incluyen:
- Fumigación total (tented fumigation): En algunas partes del mundo, para termitas de madera seca en muebles o estructuras, se encapsula la vivienda o el mueble en una carpa sellada y se libera un gas fumigante (como fluoruro de sulfurilo) que penetra en todos los rincones y extermina la colonia completa. Es costoso y requiere evacuar la casa por unos días, pero tiene prácticamente 100% de efectividad. En España no es común a nivel domiciliario (sí en Canarias, donde hay Cryptotermes brevis, una termita de madera seca introducida).
- Tratamiento combinado: Muchas empresas aplican un plan integrado: inyecciones de termiticida en puntos clave de la estructura, instalación de cebos alrededor, y seguimiento periódico por 1-2 años. Esto cubre tanto eliminar las termitas existentes como prevenir reinvasiones. Dado que los tratamientos de termitas pueden extenderse en el tiempo, suelen ser de los servicios de plagas más caros, pero a veces indispensables para salvar una casa. Si solo se encuentra termitas en un mueble concreto, pueden optar por tratártelo en taller o in situ con productos especiales.
- Garantía y certificación: Un beneficio de lo profesional es la garantía: empresas serias ofrecen revisiones anuales y garantía de 3-5 años sin termitas tras el tratamiento, porque entienden que es un proceso a largo plazo. Asegúrate de contratar compañías certificadas y con buenas referencias.
4. ¿Y si no puedo permitirme un profesional? (Medidas de contención)
A veces, económicamente no es viable un tratamiento profesional completo. En tal caso, al menos intenta contener el daño: ubica la fuente o foco principal (por ejemplo, una estantería muy atacada) y retírala de la casa si es posible. En termitas subterráneas, romper su acceso es útil: por ejemplo, quitar rodapiés infectados, aplicar barrera de insecticida en esa zona del piso, arreglar la humedad fuente. En termitas de madera seca, si el mueble no es demasiado valioso, a veces lo mejor es sacarlo y quemarlo para eliminar esa colonia local. No “regales” ni traslades un mueble con termitas a otro lugar; podrías propagarlas.
Algunas personas han reportado algo de éxito con métodos curiosos como microondas casero (dirigir una máquina de microondas modificada a un mueble para calentar las termitas) o nematodos entomopatógenos (organismos que parasitan termitas). Sin embargo, estos métodos DIY son experimentales y no siempre disponibles.
En resumen, para el dueño de casa, las opciones prácticas son: usar insecticidas disponibles (espumas, líquidos) para eliminar termitas visibles, instalar cebos si es viable, y corregir las condiciones que les faciliten la vida (humedad, madera accesible). Pero ten en cuenta que las termitas son enemigas difíciles y antiguas; pueden requerir una batalla prolongada. No te desanimes y sé persistente.

Resumen final sobre Termitas y Carcoma
Proteger nuestros muebles de madera de termitas y carcoma requiere vigilancia, prevención y, llegado el caso, acción decidida. En esta guía hemos aprendido a diferenciar estas plagas – la carcoma con sus pequeños agujeros y serrín, y las termitas con su sigilo destructivo – así como a identificar sus señales a tiempo. También vimos que hay soluciones: desde congelar o tratar con insecticida un mueble atacado por carcoma, hasta sistemas de cebo e inyecciones químicas para combatir termitas.
Lo más importante es actuar pronto. Si descubres indicios de infestación, no esperes a que “se arregle solo” (no lo hará). Retira el mueble de la zona sensible, aplica los tratamientos recomendados y observa. Muchas veces, combinando métodos caseros y productos comerciales disponibles, podrás erradicar la plaga y salvar el mobiliario dañado. Otras veces, cuando el problema es mayor (por ejemplo, termitas extendidas por la vivienda), no dudes en apoyarte en profesionales: a la larga ahorrarás dinero y asegurarás tu hogar.
En España, por suerte, contamos con una gama amplia de productos antixilófagos en el mercado – muchos de ellos disponibles en Amazon.es y tiendas especializadas – para que cualquiera pueda tomar cartas en el asunto. Un mueble bien cuidado, limpio, seco y eventualmente tratado preventivamente, difícilmente será atacado. Siguiendo las prácticas de prevención indicadas, minimizas las probabilidades de sufrir estas plagas. Y si aun así aparecen, ahora tienes el conocimiento para enfrentarlas.
Cuidemos nuestros muebles de madera, pues con un poco de atención podrán durar generaciones sin caer víctimas de la carcoma o las termitas. ¡Manos a la obra y mucha suerte en tu batalla contra estos diminutos enemigos!
Referencias: Las afirmaciones y métodos descritos en esta guía se basan en información verificada de expertos en control de plagas, empresas especializadas y fuentes técnicas. Para más lectura o asesoramiento, puedes consultar las fuentes citadas a lo largo del texto. Todas las recomendaciones se han adaptado a un lenguaje sencillo para facilitar su comprensión, sin perder rigurosidad en lo esencial. Recuerda siempre seguir las instrucciones de seguridad de cualquier producto químico que utilices y, ante dudas, buscar consejo profesional. ¡Que tus muebles se mantengan a salvo de estos invitados indeseados!